weekend at Festival eves...

Sábado por la noche. Falta menos de una semana para que inicie el Festival Cervantino pero lo que se respiraba en el ambiente era algo muy parecido a lo que éste era hasta antes de 1995 (muy disfrutable, la gente que venía sabía realmente de que se trataba), la ciudad se está preparando para el festival que comenzará el 6 de octubre, mucha gente en la calle, muchos servicios y propaganda instalándose, parecía una especie de “ensayo general” .

Aún faltaba media hora para encontrarme con Est., por lo que decidí caminar por la ciudad: el pasaje Von Humboldt, la Plaza de la Paz, San Fernando, San Roque, y justo al terminar San Roque, en la esquina donde se encuentra la casa de "las buenas conciencias" vi a GL, estaba abajo, en el Jardín Reforma, nos saludamos y me invitó a su galería, donde pude apreciar su trabajo, la pasé excelente, minutos después estaba otra vez en la calle, atravesé el Reforma, bajé a la Av. Juárez y en la Plaza de Los Ángeles subí por la Antigua de Gallos para después bajar por Barranca hasta Alonso, de ahí subí a la Plaza de la Paz por el callejón de La Estrella, llegando a la plazuela frente a la Presidencia Municipal me encontré a Alf. un antiguo compañero de arquitectura, sentado en uno de los escalones que delimitan la plazuela, me dio mucho gusto saludarlo y platicar con él, le conté que estaba de regreso en la ciudad, el me contó de su trabajo, intercambiamos tarjetas y acordamos llamarnos para tomar un café en otra ocasión, nos despedimos al llegar Est., quien ya se había retrazado, después de las disculpas acostumbradas entramos al Italian Coffee en la esquina de la plazuela, y a la par de un café latte doble platicamos largamente tanto que nos llevaron la cuenta cuando el café estaba por cerrar.

De ahí partimos a la calle de Sopeña, al Café Galería para ser exacta, donde nos tomamos unas cervezas, aunque tuvimos que salir después de un rato debido a que estaban por cerrar, ¡vaya suerte!, aunque estuvo bien ya que fue el pretexto perfecto para entrar a La Botellita, un nuevo lugar que se inauguró hace apenas una semana, ubicado en la esquina del Jardín de la Unión justo frente al Hotel San Diego, ahí continuamos con la plática y con las cervezas también.

La Botellita me sorprendió, el concepto, la ambientación y el servicio son buenos, nos ubicamos en una mesa junto a una de las altas ventanas, frente a nosotras está una pared decorada en blanco y negro con motivos del día de muertos: calaveras y huesos, sobre esa pared resalta en un nicho, una reproducción tamaño real de La Catrina de J.G. Posadas, en la pared contigua sobresale un altar y la pared está decorada con papel picado de múltiples colores, en dos de las esquinas del salón en donde nos encontramos están sendas botellotas hechas de herrería, pelotas multicolores iluminadas y rebozos, dichas botellas cuelgan del plafón originalmente a manera de candiles y acompañan al resto de los elementos de iluminación (otros candiles con forma de mujer en donde las pelotas multicolores que iluminan están contenidas en sus largas faldas), el piso lo conforman largos tablones de madera, y la doble altura del lugar permite que a través de sus grandes ventanales se disfrute de la vista nocturna de los edificios localizados sobre la calle Luis González Obregón. Disfrutamos del lugar escuchando la música en vivo (percusiones impregnadas de folklore mexicano) y acompañadas de unas coronas y varios cigarrillos platicamos de tantas cosas entre ellas de K. cierto amor platónico de hace ya mucho tiempo, de su vida, de la mía y de mucho más, salimos de ahí a las 2:00 AM, fue una buena noche.

Disfrutar de mi ciudad antes de Cervantino fue sencillamente delicioso, se que tendré que esperar a que pasen 3 semanas para volver a salir un fin de semana y disfrutar de las calles, los cafés, los bares, y todo lo demás, yo no salgo los fines de semana a la ciudad en Cervantino sólo a los eventos artísticos, lo haría si el ambiente fuera el de los cervantinos de antes del ’95, pero el ambiente de estos últimos años no me gusta, ahora viene mucha gente con la idea de tomar al festival como un carnaval, estas personas tienen una idea muy diferente de lo que es en realidad este evento de cultura, tengo la esperanza de que sea diferente este año, por lo pronto me quedo con mi experiencia de fin de semana pre-cervantino y con el magnífico recuerdo de K. que esa noche Est. reavivó…